Calles y rincones de Sancti Spíritus de Cuba: Antigua Sociedad "El Progreso"/Biblioteca Provincial

Uno de los edificios más hermosos y elegantes de nuestra villa.

El terreno que actualmente ocupa el edificio estaba ocupado por una casa de ladrillo y tejas construida a a principios del siglo XVIII.

Entrada de los reconcentrados de Valeriano Weyler a Sancti Spiritus. 1896.

A la derecha se observa la casa que ocupaba el lugar donde luego se construyera el edificio.

Esta vivienda tuvo varios usos, entre ellos el de oficina de la Real Factoría. Era una de las mejores casas de la ciudad; tan lujosa que, incluso, tenía pisos de mármol y amplios ventanales de madera preciosa torneada.

A inicios del siglo XX albergaba también el teatro Cuba y un comercio de confituras y refrescos. Era propiedad de Sebastián Cuervo Serrano, cuyos herederos en varias oportunidades se negaron a ceder, hasta que un incendio surgido en forma misteriosa la destruyó totalmente una noche de 1927.

Entonces, decidieron vender las ruinas por 30 000 pesos a la Sociedad El Progreso, que para ese entonces celebraba sus encuentros y actividades en una casona ubicada a escasas cuadras.

Contando con la dirección del arquitecto espirituano Alberto Luis Mendigutía Silvera y la ejecución de Pepe Trelles, fue colocada la primera piedra el 10 de octubre de 1927.

De izquierda a derecha: Mariano Echemendía, Ricargo Mendigutía, Felix Garcia, Alberto Mendigutía y Pedro Echemendía. 10 de octubre de 1927.

Colocación de la primera piedra de la construcción del edificio.
Se observa el espacio creado por el incendio.

Etapas de la construcción del edificio

Indudablemente, el máximo impulsor fue el joven galeno Félix “Felicito” García Rodríguez, presidente de la Institución, quien desplegó su entusiasmo mediante actividades que aportaran financiamiento para la obra.

Dos años después, en diciembre de 1929, estaba concluido el edificio.

Inauguración de la Sociedad El Progreso

Una intensa vida cultural se abrió para la élite espirituana: tertulias literarias, impresión y divulgación de obras, exposiciones de pintura, certámenes, etc. Se canalizaban, además, a través de la Sección de Intereses Generales, sus preocupaciones sobre necesidades de mejoramiento de la ciudad, de las comunicaciones y la economía.

En la década de 1950, la edificación fue sede de la primera transmisión de televisión en circuito cerrado hecha en Sancti Spíritus. Artistas de renombre acudieron a la Sociedad y, mientras los filmaban dentro, los transeúntes podían verlos en televisores situados en el parque Serafín Sánchez.

El General Fulgencio Batista emitió un discurso desde su balcón principal durante su campaña electoral el 10 de septiembre de 1955. Es curioso el hecho de que no se le permitiera la entrada al edificio, por albergar éste una sociedad para blancos exclusivamente.

El 6 de enero de 1959 la institución recibió la visita del Comandante en Jefe, quien, al frente de la Caravana de la Victoria, avanzaba desde Oriente hacia la Capital. Desde el balcón central, Fidel habló por primera vez en la ciudad de Sancti Spíritus.

Luego de la nacionalización de la institución, funcionó en sus locales un club para obreros.
El 30 de diciembre de 1963 se instaló en el edificio la biblioteca pública, aprovechando la ya nutrida biblioteca perteneciente a la extinta sociedad El Progreso, funciones que cumple en la actualidad.

Fotos de los salones de lectura

Fotos del actual Salón Infantil de la biblioteca, que

antes fungiera como Sección Femenina de la Sociedad,

ubicado en el sótano con entrada por Manolo Solano (Cadena).

Este espacio también albergó durante algunos años al Teatro Infantil Guiñol.

En una de las salas del sótano se conserva una antigua prensa

Es un regio palacete de estilo ecléctico.
Se accede a él por una espaciosa escalinata de mármol de Carrara.

Dentro, el amplio pasillo tiene a cada lado varias consolas con magníficos espejos.

Al final del mismo, está una escalinata bifurcada, de mármol, con barandales trabajados en hierro.

Esta escalinata da acceso a la segunda planta

Es de notable interés hacer énfasis en el busto del Apóstol Jose Martí
que recibe a los visitantes desde su lugar de honor en el segundo piso.

Fue comisionado en 1943 y es obra del afamado escultor cubano
Teodoro Ramos Blanco, considerado, junto a Juan José Sicre,
Ernesto Navarro y Florencio Gelabert, uno de los iniciadores
de la vanguardia escultórica cubana y a la vez una de las figuras
más sobresalientes y talentosas

Desde la parte superior de la escalinata se divisa la cúpula, dotada de un bello vitral.

A finales de 2021, la cúpula mostraba graves señales de deterioro. Los trabajos de restauración iniciaron en enero de 2022.

En su construcción se empleó una tecnología artesanal, pero algunos elementos fueron fabricados industrialmente, mientras que el montaje se realizó con lo más avanzado de la época. Los materiales que se usaron fueron, fundamentalmente, hormigón armado para su estructura, cristal y madera en puertas y ventanas, mármol en las escaleras y pisos, así como yeso para las decoraciones interiores y cemento en las exteriores. El resultado: una obra de calidad y belleza excepcional.